Juan 1:38
Las primeras palabras que dijo Jesús en su
ministerio publico fueron, “¿Qué buscan?”
Quizás sin saber cómo contestar la pregunta de
Jesús, los discípulos preguntaron en donde moró Jesús. Jesús preguntó lo que
estaban buscando y en el momento es posible que ellos no supieran que era la respuesta,
“Es Tu.”
¿Que
está buscando? ¿Una esposa, un marido, mejor trabajo? ¿Ayuda en criar los niños
o pagar las cuentas hasta la universidad? ¿Más amigos, una mejor personalidad,
un camino más facial sin deudas? En 2 Corintios 1:20 Pablo declaró, “Porque todas las promesas de Dios son Sí en Él, y Amén en Él.” En
otras palabras, todas las promesas de Dios están en una persona—la Persona de
Jesucristo. Pensamos que queremos un cambio en nuestra situación o ayuda con
algo difícil. Pero, como estos nuevos discípulos, lo que necesitamos es el
Señor mismo, porque en Él todas las promesas están cumplidas.
Juan 1:39
Que genial! Jesús no
dijo, “Vayan unos 100 metros a lado del mar, e irse a la izquierda, buscan una
casita con rosas en frente y una barda blanca de madera…” No, Él dijo, “Vengan
conmigo.” Y los discípulos fueron con Él y nunca Lo dejaron. Cambiaron sus
vidas tan radicalmente que en el momento que aceptaron su invitación que aun
acordaron la hora que su peregrino inicio con Él.
Juan 1:40-42
A través de las Escrituras se refirió a Andrés como “el
hermano de Simón Pedro.” Si fuera yo en las sandalias de Andrés, pienso que yo hubiera
estado tentado decir, “¡Por fin! ¡Escapé de su sombra! He encontrado el Mesías,
y no diré nada a Pedro. Esto es mi momento para brillar.” Pero Andrés no lo
hizo porque él solo quería traer otras a Jesús. Fue Andrés quien presentó su
hermano Simón, a Jesús. Jesús usó a Pedro a traer tres mil personas a Cristo (Hechos 2:41). Fue Andrés quien trajo el niño con sus panes y
pescados para que Jesús pudiera dar de comer a los cinco mil (Juan 6:8-9). Y cuando un grupo de griegos fueron a Jerusalén
pidiendo a ver a Jesús, fue Andrés quien los trajo al Maestro (Juan 12:20-22).
En cambiar el nombre de Pedro, fuera como Jesús dijo, “Simón eres tan inestable como
la arena en la playa, pero yo veo tu potencial; veo lo que serás. Por eso estoy
cambiando tu nombre a Cefas, o Piedra. Ven conmigo, Pedro, y veras cambios
increíbles en tu persona.”
Juan 1:43-45
¡Que chistoso! En versículo 43, Jesús encontró a
Felipe y dijo, “Sígueme.” pero en versículo 45, Felipe dice, “Hemos hallado a Aquél.” Según Romanos
3:11, no encontramos a Dios. Él nos encuentra a nosotros.
Juan 1:46
Fuera del camino normal, Nazaret fue olvidado y
caída económicamente, sin importancia miliariamente, y políticamente. Nataniel,
se refirió a más que la insolación de Nazaret. Un estudiante de las Escrituras,
el conoció la promesa de Miqueas 5:2 que dijo que el Mesías no vendría de Nazaret sino
de Belén.
Aunque
Nataniel levanto una pregunta legitima, Felipe no cambió su opinión. ¿Por qué?
Una razón: Felipe había probado y visto que el Señor está bueno y aunque en
este punto no podía defender a Jesús de Nazaret teológicamente ni intelectualmente,
Felipe sabía experimentalmente que Jesús era real. También viene gente con la
intención de confundir a ustedes teológicamente. Les darán un nuevo testamento
del griego se llama la Translación del Nuevo Mundo y dicen, “Lo que dice Juan
1:1 realmente es, En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el
Verbo era un dios.” O les dará el libro de mormón diciendo, “La Biblia está
bien, pero también necesitan estudiar esto.”
En este punto del camino con Dios, no estoy engañado
tan fácilmente, porque nuestra fe es una fe razonable, que puede aguantar
cualquier argumento en cada situación. Pero, hay tiempos cuando alguien como
Nataniel, con argumentos más sutiles o inteligentes que en verdad son desafíos.
Pero como Nataniel, todas estas personas han estados equivocados. Porque no
Felipe ni Nataniel supieron que Jesús no nació en Nazaret sino en Belén.
Sabemos la historia pero ellos no sabían. Cuando afrontamos los desafíos, la
elección mejor es seguir el camino de Felipe. Mirar a ellos que cuestionan a su
fe y decir, “No puedo contestar a tu pregunta ahorita, pero ven y ve. Venga a
la iglesia este domingo conmigo y ver lo que el Señor está haciendo.”
Juan 1:47
Que bueno que Nataniel fue con ellos, aunque él quedó
con preguntas espiritualmente y dudas intelectualmente él aceptó la invitación
a ir y ver.
La palabra traducido “engaño” es “Jacob” en la
Septuaginta. Jacob era engañoso. Él engañó a su hermano Esaú por la bendición
de su padre y la herencia también. Él engañó a su tío Labán de muchas de sus
cosas materiales. Pero después de una noche con el Señor, Jacob se dio cuenta
de lo que había querido desde el principio no fueron las cosas del mundo sino
la bendición del Señor (Génesis 32:26).
Y desde aquella noche el Señor cambió a su nombre de “Jacob” a “Israel” de
"agarrador del tobillo," y "engaño" a "gobernado por
Dios."
Juan 1:48
En los tiempos de Jesús, los estudiantes estudiaron
tradicionalmente abajo los higüeros. El higüero es el símbolo nacional de
Israel, creo que era bajo del higüero que Nataniel estaba estudiando Génesis 28- la historia de Jacob en el
desierto…
Aunque hay un dicho que dice la mejor almohada es
una conciencia limpia, Jacob por sus engaños y decepciones tenía miedo de la
muerte, él usó una piedra. El soñó de una escalera descendiendo de los cielos
hacia a la tierra, con ángeles en ella. “Verdaderamente Dios está aquí, y no
sabía yo.” dijo Jacob.
Por
eso, en medio del estudio de Génesis 28,
Jesús acerco a Nataniel dijo de él: “He aquí un
verdadero israelita en quien no hay engaño.”
Juan 1:49
De repente, Nataniel dejo su estudio teológico y
dijo a Jesús, "Estás haciendo referencia al mismo pasaje que estaba
leyendo. ¿Cómo puede ser esto? Ciertamente, Tú eres el Hijo de Dios, el Rey de
Israel."
Juan 1:50
"¿Crees tú, simplemente porque hice referencia
al pasaje que estaba leyendo?" preguntó Jesús. "Quédate, Nataniel. ¡Vas
a ver mucho más que eso!"
Juan 1:51
"Piense en la historia, Nataniel," dijo
Jesús. "La escalera de que estabas leyendo soy yo. Soy la escalera entre
el cielo y la tierra. Yo Soy el camino hacia la eternidad. Sobre mí los ángeles
ascienden y descienden."
Nota que Jesús dijo que "ascienden y
descienden". Mucha gente piensa que los ángeles viven en el cielo,
desciende a la tierra de vez en cuando, viajar un poco, y luego regresar al
cielo. No es cierto. Los ángeles son espíritus ministradores asignados a
determinados santos, iglesias, y las regiones del mundo (Hechos
12; Apocalipsis 2:1; Daniel 10). Aunque pueden subir a los
cielos, su lugar de residencia principal está con nosotros, con esta iglesia, y
con varias naciones. Por lo tanto, el orden de las palabras aquí es
significativo. Sí, los ángeles suben a los cielos, pero siempre descienden a la
tierra.
Juan 2:1
En los tiempos de Jesús, la celebración de bodas
judías duraron una semana, tiempo durante el cual los familiares y amigos se
quedarían en la casa de la novia y el novio-una especie de luna de miel/reunión
familiar/despedida de soltero/fiesta nupcial, ¡todo en uno! Durante esta
celebración de siete días, la novia sería escondida en una zona apartada de la
casa y no ser visto por nadie más que su novio. Al final de la semana, ella saldría
con gran fanfarria y celebración. Esto es fascinante, ya que se refiere a la
fiesta de las Bodas del Cordero. Usted ve, cuando el Rapto ocurre, nosotros-la
novia de Cristo, nos será arrebatado al cielo por siete años. Al igual que la
novia judía fue recluida con su novio durante siete días, vamos a estar
escondido en la intimidad con el Señor Jesucristo, lejos de la tribulación que
se desató sobre la tierra.
Juan 2:2
La presencia de Jesús en esta boda especial señala
su sello de aprobación sobre todos los aspectos de la institución del
matrimonio-civiles, legales y religiosos. Una ceremonia de la boda en sí tiene
un efecto que no se entiende a menudo. Parejas encontrar un compromiso entre sí
en un acto público más difícil de romper cuando las cosas se ponen difíciles.
Tal vez por eso las estadísticas muestran que los que viven juntos antes del
matrimonio tienen una tasa de divorcio sustancialmente más altos que los que no
lo hacen. Sigo sorprendido por el gran número de parejas que dicen: "¿Qué
importa un fragmento de papel? ¿Por qué no podemos simplemente hacer un
compromiso privado con Dios y el uno al otro sin la totalidad de los
procedimientos legales y religiosas?" Aquí en Juan
2, en el mismo comienzo de su ministerio público, Jesús honró y
elevó la institución del matrimonio.
No me sorprendo que la boda fuera el inicio del
ministerio público de Jesús, simplemente porque cuando regresamos a la primera
boda de la Biblia también encontramos las huellas de Dios en todo. Jehová lo
dio a Adán su varona, Eva (Génesis
2:18-25) y desde entonces el matrimonio es la relación que vemos
a través de todas las Escrituras hasta la Boda del Cordero en Apocalipsis.
Juan 2:3
Algunos han sugerido que la preocupación de María
sobre la escasez de vino indica que puede haber sido una anfitriona en esta
boda. Dado que el papel de anfitriona en una boda judía fue generalmente ocupado
por una tía del novio, la celebración del matrimonio podría muy bien haber sido
el del sobrino de María, Juan. María buscó a su Hijo para obtener ayuda.
Sin embargo, con base en la respuesta de Jesús, es
mi convicción personal de que María estaba interesada en algo más que la simple
provisión de vino. ¿Podría ella haber estado buscando una restauración de su
reputación?
Usted ve, como una joven de unos catorce o quince
años de edad, María se había convertido milagrosamente embarazada por el
Espíritu de Dios. Sí, fue muy favorecida por Dios y bendita entre las mujeres.
Pero también debe haber sido objeto de especulaciones y calumnias, las
cejas levantadas y las malas lenguas. Defendiendo su propia justicia, los
fariseos con suficiencia declararon a Jesús: "Nosotros no somos nacidos de
fornicación" (Juan 8:41), la implicación
es que él había sido.
Durante treinta años, María había vivido con la
certeza de que su personaje había sido calumniado injustamente. ¿No es posible
que en este momento, mirara a su hijo no sólo por el vino, sino de
reivindicación, pensando que si la gente sólo podía ver quién era realmente,
tal vez lo harían por fin ver la verdad acerca de ella también?
Juan 2:4
Gune es la
palabra griega traducida como "mujer". Es un término de respeto, pero
no de cordialidad. Por lo tanto, Jesús responde a María con una reprimenda
suave. Esto suena como una respuesta fría por parte de Jesús a Su paciente y
dulce madre. Sin embargo, como se observa en el resto del verso, que era tanto
para el bien de su madre como por la gloria de su Padre.
"Mi hora" es un término usado en el
Evangelio de Juan en siete ocasiones. ¿Hasta qué hora se refería Jesús? En
Juan_17: 1, Él oró "Padre, la hora ha llegado, glorifica a tu Hijo para
que tu Hijo te glorifique a ti."
•
"La hora" es el momento de la crucifixión de Jesús, la resurrección y
la ascensión.
• "La hora" es el momento de la declaración irrefutable de
quién era, de la prueba innegable de su deidad.
•
"La hora" es cuando se terminó su ministerio terrenal, su misión
señalada completado, su Padre plenamente glorificado.
"Mujer... María... Madre..." Jesús dijo:
"Yo sé mejor que nadie que ha estado esperando pacientemente. Sé mejor que
nadie lo que ha sido herido. Yo entiendo mejor que nadie su situación. Pero no
es tiempo de rectificar todo... todavía no."
¿Qué dice esto a nosotros? A menudo, creo que le
pedimos al Señor que haga algo que nos llevará fuera del gancho o hacernos
parecer un poco mejor. Le pedimos que haga algo que va a suavizar el camino o
aligerar nuestra carga. Al igual que María, nuestras peticiones pueden sonar
muy noble, muy generoso, muy altruista, pero en realidad, son egocéntricos. Y
en estos casos, Jesús podría susurrar en nuestros corazones, como lo hizo con
María, "¿Qué tengo yo que ver contigo? Esta no es la hora. Este no es el
momento. Este no es el lugar. El problema se resolverá. Su reputación se puede
salvar, se realizará la prestación. La curación se puede disfrutar. Pero
todavía no. Mi hora no ha llegado todavía."
Daniel estaba en un lugar de prominencia y una
tremenda autoridad en el reino de Nabucodonosor. Luego, cuando tenía alrededor
de sesenta y cinco años, Nabonido llegó al poder, y Daniel fue destituido de su
cargo. Durante veinte años, Daniel no se ve en el relato que se nos da en el
libro que lleva su nombre. Pero entonces, el día amaneció que Belsasar lo llamó
para interpretar la misteriosa escritura en la pared (Dan 5:13).
Cuando Darío de Media tomó el control del reino poco después, Daniel fue
colocado en una posición de prominencia de nuevo. Así, durante veinte años,
Daniel se utiliza ni en el ministerio ni dado una posición de responsabilidad.
Sin embargo, Daniel, siendo un hombre de integridad, hizo lo que debemos hacer:
Se quedó listo.
Sea como Daniel, santos preciosos. No digas:
"He estado caminando con el Señor durante cinco años, y no pasa nada, así
que creo que voy a ir al cine, unirse a la liga de softbol de la ciudad, o tome
la observación de aves." Gente, es su trabajo y mi trabajo es ser listo
para caminar con el Señor, para pasar tiempo en la presencia del Señor, y para
conocer al Señor para que cuando Belsasar dice: "¿Qué quiere decir
esto?" como Daniel, podemos decir: "Yo puedo decir, porque hace
veinte años que he estado en contacto con Dios. Durante veinte años, he estado
en el lugar de la oración. Durante veinte años, he estado cerca del Señor
".
¿Está usted en la oración? ¿Está estudiando la
Palabra? ¿Está amando al Señor? ¿Está listo? En un determinado momento, su hora
llegará. Su hora llegará. Una tarea importante, una oportunidad de cambio de
vida se levantará, y entonces será demasiado tarde para prepararse.
Cuando Jesús
descendió del monte de la transfiguración, él se encontró con un hombre que le
dijo: "Maestro, traje a mi hijo epiléptico a tus discípulos, pero no le
podía ayudar." Entonces Jesús echó fuera el demonio en el niño.
"¿Por qué nosotros no pudimos hacer eso?"
preguntaron sus discípulos.
"Este clase no sale sino con oración y
ayuno", respondió Jesús (Mateo 17:21).
Si se necesita la oración y el ayuno para echar
fuera un demonio de esa naturaleza, ¿Cómo íbamos a saber que tendríamos este
tipo de encuentro? los discípulos deben haber preguntado. Pero yo creo que
Jesús estaba dando a entender que, debido a que no saben que las oportunidades
para ministrar vendrían a su manera, que deberían haber estado viviendo una
vida de continua oración y ayuno.
¿Por qué no fueron los discípulos orando? Sugiero
que era porque Jesús estaba en la montaña con Pedro, Santiago y Juan. Sugiero
que era porque los nueve discípulos allá abajo estaban diciendo, "Siempre
es Pedro, Santiago y Juan. Llegan a subir la montaña. Siempre están en el
círculo interior. Pero ¿qué pasa con nosotros? Nunca conseguimos hacer
nada". Y porque era su mentalidad, no estaban intercediendo. Ellos no
estaban orando. Ellos no estaban preparados.
Así, también, hay quienes hoy en día que dicen:
"El Señor no me usa. La iglesia nunca me llama." Pero cuando la
oportunidad se presenta ante ellos, o bien son incapaces de cumplir con ella o
son totalmente inconscientes de ello. Santo, su responsabilidad en el
ministerio es estar listo y luego a descansar. Estudiar la Escritura en el
lugar de intimidad y oración. Adora al Señor. Conocerlo aún más. A
continuación, sólo descansar, diciendo: "Señor, ¿cuándo viene la hora en
que usted quiere usarme para hacer algo por tu gloria? Estoy listo."
La transformación radical se producirá en su caminar
con el Señor, cuando se da cuenta que Él es el Maestro y que usted no es. Él es
el rey, y usted es el sujeto. Él es el jefe, y usted es el siervo. Su trabajo
no consiste en pedir a Él, o incluso hacer sugerencias a Él. Su lugar es estar
listo para Él, y para descansar en Él.
Juan 2:5
Me parece teológicamente significativo que en estos,
sus últimas palabras registradas en la Biblia, vemos a María dirigir los siervos
a su Hijo en lugar de actuar como mediador o enlace para Él. Los que creen que
tienen que ir a través de María para que sus oraciones sean escuchadas o para
ganar influencia en los cielos no han estudiado cuidadosamente la relación
entre Jesús y su madre. Ella no llevaba mucha autoridad con Él. Oh, Él la amaba
y se preocupaba por ella, incluso cuando estaba en la Cruz. Pero su alma no fue
influenciado por ella ni se lo había tomado órdenes de ella...
Cuando le dijeron que su madre quería verlo, dijo a
Jesús: "¿Quién es mi madre? ¿Y quiénes son mis hermanos? Los que oyen y
guardan la Palabra de Dios son mi madre y mis hermanos." (Ver Lucas 8:21). Más tarde, en Hechos
1, vemos a María con los otros discípulos orando en el cenáculo.
Ella no conduce la reunión. Ella no está en un lugar de honor o fama. Ella es
sólo una de ellas. Hay un solo mediador entre Dios y el hombre-no María, pero
"el hombre, Cristo Jesús" (ver 1 Timoteo 2:5).
Juan 2:6-8
Para ustedes que buscan servir a Jesús en un mayor
grado, hay tres características importantes de los servidores a tener en cuenta
en esta historia...
La primera es la obediencia. Los funcionarios no
discutieron con Jesús, o hacer preguntas a él. Ellos simplemente hicieron lo
que les pidió que hiciera.
La segunda es la exuberancia. Los criados llenaron
jarras enormes de 60-litros hasta el borde, a pesar de que no tenían idea de lo
que sucedería a continuación. ¡No había nada a medias de estos chicos!
La tercera es la paciencia. Jesús no dijo:
"Está bien, siervos, vienen aquí. Este es el plan. ¿Vean esas grandes
jarras ahí? Quiero que ustedes llenarlos con agua. Luego, a medida que comience
a echar hacia fuera y servir al gobernador, un milagro se llevará a cabo y el
agua se convierte en vino. Juan escribirá sobre él en el segundo capítulo de su
Evangelio, ¡y ustedes van a ser famosos!"
No, Jesús dijo a sus siervos las cosas que hacer
sólo un paso a la vez. En primer lugar, debían llenar las jarras con agua.
Después de haber hecho eso, Él les ordenó que se extraigan el agua y llevarla
al gobernador. El milagro se produjo sólo a medida que fielmente siguieron cada
paso.
Demasiado frecuentemente, me quiero saber cuáles son
los pasos del dos al cinco van a ser antes de que yo sigo el paso uno.
"Quiero saber dónde todo esto está sucediendo, Señor. Avísame donde estaré
el próximo mes, el próximo año, y dentro de tres años. Póngalo de manera clara,
Señor, y luego voy a ir a por ello." El Señor no funciona de esa manera.
Él desarrolla su plan para nosotros de la misma manera que hizo por los
sirvientes en las bodas: un paso a la vez. Y el punto en el que dejamos de
obedecer es el punto en que deja de suceder.
Juan 2:9-10
Tan conocida es esta historia, se puede relatar hoy
por creyentes e incrédulos igual. En ese momento, sin embargo, los únicos que
sabían lo que había ocurrido era la gente más humilde que asistieron a la boda:
los sirvientes. Nadie sabía de donde venía el vino. No hubo "oohs" y
"aahs", como se vierte el vino. No hubo miradas de reconocimiento
hacia al Carpintero con treinta años de edad. No había prisa repentina de
personas a lado de Jesús. Sólo había algunas bocas abiertas y los ojos muy
abiertos en los rostros de algunos criados cansados.
Este primer milagro público de Jesús fue similar a
su primera aparición en la tierra, porque entonces sólo unos pastores estaban
al tanto de lo que había sucedido. Habrá momentos más tarde en su ministerio
cuando Él demostraría su deidad con la autoridad audaz e impresionante. Pero en
este día particular en Caná, escogió para revelarse sólo a algunos humildes
siervos obedientes.
A lo largo de la historia, ha habido aquellos que
utilizan esta historia para justificar el consumo de alcohol. "Jesús hizo
vino. Jesús bebió vino. Así que no me hables de no beber", insisten.
"Si su argumento se basa con sinceridad en el
ejemplo de Jesús, que nunca volverá a beber", le respondo. "Mira Lucas 22:18 donde
Jesús dice que no beberé más del fruto de la vid hasta que el reino de Dios
venga. Incluso si Jesús bebía vino fermentado-un punto de vista al que
personalmente no me suscribo -ya que Él, como el modelo no va a beber otra vez
hasta que el reino venga, usted tampoco debería. "
Como pastor, estoy cansado de ver el daño se inflige
el alcohol a nuestros hijos, nuestras familias y nuestra sociedad en su
conjunto. Toda persona que haya comenzado a beber lo ha hecho pensando que
sería cuidadoso, que iban a permanecer en control. Pero el hecho de que
dieciocho millones de estadounidenses son alcohólicos conocidos demuestra lo
contrario.
Salomón declara: "No es para los reyes beber
vino, ni de los príncipes la sidra, no sea que bebiendo olviden la ley, Y
perviertan el derecho de todos los afligidos. Dad licor al que va a perecer, y
vino a los que son de gran tristeza. Beban, y olvídense de su necesidad, y de
su miseria no más" (Proverbios
31:4-7). Si usted está pereciendo, que literalmente significa
"maldito", o si está deprimido hasta el punto en que no puede
soportar la vida, usted tiene el permiso de Salomón a participar del alcohol.
Pero si quieres ser un líder, él advierte que se
mantenga alejado del alcohol para que no cortocircuito el proceso de
pensamiento. Salomón tenía razón, porque la ciencia ha demostrado ya que cada
gramo de alcohol consumido destruye permanentemente diez mil dendritas, o
filamentos, en las células nerviosas del cerebro. Si bien es cierto que cada
uno de nosotros tiene millones de dendritas, creo que es justo decir que
ninguno de nosotros tiene alguna de sobra. ¡Si usted es como yo, necesita todas
las dendritas que usted puede conseguir! Sé sabio, gente preciosa, y considerar
muy seriamente los efectos del alcohol sobre el espiritual y el bienestar
físico, la estabilidad de la familia y la salud de nuestra sociedad.
Juan 2:11
Comparar este primer milagro público de Jesús, el
"portador de la gracia", con el primer milagro de Moisés, el dador de
la ley. Moisés convirtió el agua del Nilo en sangre, lo que habla del juicio.
Jesús convirtió el agua en vino en las bodas, que habla de la alegría. Así,
también, si usted se acerca la Palabra legalista, será como un río. Usted va
sangrienta sí mismo y todos a su alrededor. Pero si usted busca a Jesús en el
agua de la Palabra, se encuentra el vino de la alegría producir tal gozo en su
interior que la gente en toda la zona serán atraídos a usted.
El primer milagro público de nuestro Señor ocurrió
en una ceremonia de matrimonio. Creo que es porque los milagros diarios son
esenciales para nuestros matrimonios. En el breve relato del milagro de Caná,
un hermoso cuadro que desarrolla ilustra cómo el Señor puede tener un
matrimonio que parece fracasado o aguada, y convertirlo en algo brillante,
burbujeante y alegre. El matrimonio no debe ser simplemente funcional, como el
agua. Debe ser maravilloso, como el vino.
Como se cita en el San Francisco Chronicle, el Olympio más antiguo de
los Estados Unidos, ganador de la medalla de plata en los mil quinientos
carrera en 1912, con noventa y nueve años de edad, Abel Kibiak, dijo que está
buscando a una mujer para "andar con".
"Ella no tiene que tener los dientes", dijo, "sólo una
licencia de conducir."
Creo que muy a menudo tenemos una "Abel Kibiak" mentalidad
sobre el matrimonio. Nos conformamos con tan poco, cuando el Señor quiere
bendecirnos con tanto. Usted ve, Dios ha escogido que el matrimonio sea la
figura singular en que un mundo incrédulo puede ver que Jesús está vivo.
¿Cómo sucede esto?
Mira la historia, y usted encontrará que el
procedimiento es tan simple. Jarras de barro estaban llenos hasta el borde con
agua, siervos sacaron del agua, y el agua se convirtió en vino. Pablo declara
que somos vasos de barro (2 Corintios 4:7).
Por lo tanto, he de permitir que la Palabra de Dios
que me llene hasta el borde. Entonces me voy a hacer el esfuerzo y tomar el
tiempo para sacar de lo que me ha llenado con el fin de servir a mi esposa.
Ella, por su parte, ha de permitir que la Palabra de Dios para llenar su hasta
el borde con el fin de que me pudiera servir. Y al hacer esto, nos encontramos
en Cana, donde el agua de la Palabra se convierte en el vino de la alegría.
No me refiero al hablar de complejidades teológicas
o una exégesis del Pentateuco. Estoy hablando de simplemente compartir lo que
sea que estimula, convictos, o le interesa en su viaje a través de la Palabra.
Juan 2:12
Aquí es María sigue al lado de su Hijo. El reproche en este capítulo
no impidió que ella de seguirle. Tal vez los trajo aún más cerca. No desprecies
la reprensión del Señor, hermanos, ya que está destinado a acercarlos más a su
lado.
Juan 2:13-15
La Pascua fue vinculada con otra fiesta que se celebró
siete días más tarde, la Fiesta de los Panes sin Levadura. Durante la Fiesta de
los Panes sin Levadura, los Judíos tuvieron que asegurarse de que ninguna
levadura estaba presente en sus hogares. Buscaron en cada rincón, cada armario
y cada utensilio de cocina para librar su hogar de todo rastro de levadura, el
símbolo del pecado. En el siguiente relato, vamos a ver a Jesús dar vida a la
imagen del Antiguo Testamento como Él limpia la casa de su propio Padre de la
maldad y el pecado dentro de ella.
En frente del templo eran cuatro patios separados
por cuatro puertas que llevan de una a la otra. El primer patio, el patio de
los gentiles, era accesible a todos. Hombres y mujeres, judíos y gentiles todos
podían entrar en el atrio de los gentiles. Más allá del patio de los gentiles
era el patio de los israelitas. Los gentiles fueron excluidos de este tribunal
bajo pena de muerte. El tercer patio era el tribunal de los hombres. Varones
judíos eran los únicos autorizados a entrar en este tribunal. Por último, junto
al templo mismo fue la corte de los sacerdotes, en el que se permiten solamente
los sacerdotes admisión.
En el patio de los gentiles, se vendían bueyes,
ovejas y palomas. ¿Por qué? Debido a que los sacerdotes estaban llenos de
codicia y avaricia. Codiciar significado simplemente querer más de lo que uno
ya tiene lo suficiente, estos líderes pseudo-religiosos judíos querían más
dinero para aumentar sus propias arcas. Por lo tanto, los bueyes, las ovejas, o
palomas, que el pueblo a sacrificar en el templo eran, después de una
inspección por los sacerdotes, por lo general declarada no apta para el
sacrificio debido a algún defecto o imperfección microscópica. Adoradores
fueron instruidos para comprar animales "aprobación previa" de los
puestos en el patio. Los precios de los animales "puros" eran
exorbitantes, por lo que los sacerdotes hicieron un montón de dinero de los
suplicantes desprevenidos.
Los cambistas emplearon una táctica similar. Cuando
los extranjeros llegaron al templo para pagar el impuesto del templo y para
hacer ofrendas, su dinero fue declarado incapacitado debido a la imagen de
César o de otra deidad extranjera inscrito en ella. Los cambistas serían
entonces cambiar moneda extranjera de shekels a un costo de hasta diez veces la
tasa de cambio normal. Jesús entró en la escena y vio de inmediato que su
pueblo estaban siendo robados y estafados. En la corte de los gentiles, el
mismo lugar donde se debería haber presentado al mundo el Dios vivo y
verdadero-los sacerdotes estaban esquilando su rebaño en lugar de darles de
comer.
Aquí, la historia es muy diferente de lo que paso
previamente en el capítulo…
·
En la boda, Jesús sentó en la mesa.
·
Aquí, Él está tirando las mesas.
·
En Cana, Él trabajaba tranquilamente y privadamente.
·
Aquí, Él está reaccionando conspicuamente y públicamente.
·
En la fiesta de la Boda, el énfasis estaba la
alegría.
·
Aquí, la resulta final es juicio.
Y
sin embargo, creo que existe una relación muy interesante entre estos dos
relatos.
Ambos se tratan con mesas. Ambos tratan con Jesús
deseando traer alegría. Nuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo (1 Corintios 6:19), hay cosas en nuestras
vidas, en nuestros templos, que nos están estafando con tanta seguridad como
los sacerdotes y cambistas arrancaron la gente fuera en tiempos de Jesús.
En consecuencia, hay una conexión directa entre la
alegría producida en la mesa de la boda y el juicio que ocurrió en la mesa del
templo, porque si yo me voy a tener alegría, el Señor quiere expulsar el pecado
que me está robando. Alegría y el juicio van de la mano, ya que sin la alegría,
el juicio sería insoportable, pero sin juzgar, el pecado corrían desenfrenados.
Sí, hay placer en el pecado por una temporada, pero es seguido por la
destrucción (Hebreos 11:25).
Por lo tanto, dice el Señor amorosamente para usted
y yo: "Yo quiero ir a través de su vida, anular las mesas, y expulsar
el ganado por lo que no lo defrauden de lo que quiero hacer en y a través de
usted." ¿Cómo sucede esto en la práctica? Creo que tiene lugar en una
tercera mesa, no la mesa del banquete de la boda o de la mesa en el templo,
sino en la mesa de la Santa Cena.
La Comunión de la Santa Cena produce alegría rica y
satisfactoria junto con el juicio profundo y su purificación, para ella es
cuando usted tiene los elementos de la Comunión en la mano mientras está de
rodillas ante el Señor que se puede escuchar la voz de la compasión y la
corrección de una manera única y poderosa.
Juan 2:18
Notan que no dijeron, "¿Por qué haces
esto?" Cada persona allí sabía que el templo necesitaba limpieza, ya que
sus prácticas eran corruptas. Por lo tanto, nadie le preguntó a Jesús por qué
hizo lo que hizo. Más bien, se les pidió que le hubiera dado la autoridad para
hacerlo.
Juan 2:19
La palabra griega traducida como "templo"
es naos, que también fue utilizado en referencia al Lugar Santísimo. Tal vez
Jesús señaló físicamente a sí mismo cuando hizo esta declaración. Por lo menos,
él se refirió a sí mismo cuando lo hizo. "Destruyan este templo-Yo",
dijo, "y en tres días lo levantaré", que es precisamente lo que
ocurrió en el Calvario.
Juan 2:20-21
Herodes había comenzado la renovación del templo en
el año 20 aC y esta historia que se nos ocurrió en 26-28 dC. Así, el templo
había estado en construcción durante cuarenta y seis años en ese momento y se
mantendrá en construcción hasta el año 64. Tan impresionante como lo fue
masiva, Josefo registra que dieciocho mil hombres estaban empleados en el
proyecto durante el curso de su renovación. Con esto en mente, es fácil ver por
qué los Judíos pensaron que el Carpintero de Galileo era loco con su pretensión
de reconstruir la cosa entera en sólo tres días.
Juan 2:22
Este es el tercer caso registrado en este capítulo
donde los discípulos "recordaron" o "creyeron". En el
versículo Juan 2:11, el agua cambió en vino
les causó a creer. En el versículo Juan 2:17,
de la purificación del templo hizo que recordaron. Pero aquí, en el versículo Juan 2:22, la Resurrección les causó tanto a
recordar y creer.
Juan 2:23
Hay algunos que buscan una prueba milagrosa que
Jesús es real y que Él los ama. Ellos buscan física, material o verificación
financiera de Su realidad. Pero la suya es una endeble fe defectuosa construida
sobre un fundamento banco de arena, ya que, como veremos más adelante, Jesús no
está comprometido con aquellos que exigen una señal. Usted ve, el problema con
los signos es que nunca son suficientes. Si usted basa su fe en los signos,
siempre va a estar molesto por la que no sucedió- la oración que no fue
contestada, la curación que no llegó, el pago que no llegó. Es por eso que
nuestra fe debe ser desarrollada y basada no en lo que hace Jesús, sino en quien
Él es. Quién Es como se revela en la Palabra. Por eso Pablo dice que la fe es
por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios (Romanos10:17).
Es la Palabra que apunta a la persona de Jesucristo, que produce la fe genuina.
Juan 2:24-25
La palabra traducida como "compromiso" en
el versículo Juan 2:24 es la misma palabra traducida como
"creer" en el versículo Juan 2:23.
En otras palabras, muchos creyeron en Jesús cuando vieron los milagros, pero
que no creía en ellos, porque Él conocía sus corazones. Manténgase sintonizado,
amigos. En Juan 3, se le presentó a
alguien que, a diferencia de estas personas, buscó a Jesús por quien Él era y
no sólo por lo que él podía hacer.